martes, 10 de enero de 2012

Conviertes..

Conviertes mis historias en relatos incorpóreos sin un rostro en el que detener la mirada.
Reduces la tinta perecedera de mis lápices a meros garabatos lanzados en el aire sin consideración alguna.
Vistes una goma que se dedica a pisar cada trazo que mi lápiz va dibujando con detalle y esmero. Lo pisas, borrándolo, y no dejas nada de él, ni siquiera ese punto que forma el inicio de toda recta que se precie.

Qué distinto sería todo si, en vez de gastar tu tiempo en boicotear cada una de mis acciones, decidieras acompañarme y gastar, conmigo, lápices, lápices, lápices.. y más lápices. Y gastáramos tantos lápices que dejáramos sin bastimentos al país.



No hay comentarios:

Publicar un comentario