martes, 14 de junio de 2011

#Boliypapel.

He llegado a una conclusión.
Los escritos que más merecen la pena son aquellos que salen nada más coger papel y boli.
Su mecanismo es muy sencillo: las palabras fluyen en tu mente, tú no reflexionas por ellas, ni en ellas, ni sobre ellas; simplemente llegan, las plasmas y cuando terminas lo relees, pero ni lo cambias, ni lo retocas.

Si no le encuentras mucho sentido, probablemente sea una de las mejores cosas que hayas escrito en mucho tiempo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario