domingo, 7 de octubre de 2012

Silencio.


Te vuelves silencio
en cada esquina de palabra.
Despedida,
entre los suspiros
que no lograste domesticar.
Me escondo,
de nuevo,
para dejar de escucharte
detrás de cada sonrisa de amor.
Y desato verbos oxidados,
porque las tempestades,
hace mucho que se nos quedaron pequeñas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario